Enmendar en agricultura significa corregir un problema o una deficiencia del suelo de cultivo.
Una enmienda agrícola es un producto o la mezcla de varios productos que permiten subsanar o mejorar una condición física, química o biológica detectada en el suelo y con su aportación se consigue aumentar o corregir la calidad del mismo. Los productos pueden ser orgánicos o inorgánicos y contienen nutrientes, minerales, microorganismos y otros elementos que mejoran la fertilidad del suelo. Las enmiendas agrícolas también ayudan a igualar o equilibrar el pH del suelo y reducir la salinidad.
Con una corrección de dicha deficiencia se permite mantener la productividad de las plantas; de lo contrario, en caso de mantenerse sin esta aportación, no permitiría que el cultivo o la planta se desarrollase adecuadamente.
Las técnicas han ido evolucionando, por lo que encontramos de tradicionales o elementales de primera generación hasta las más evolucionadas técnicamente de tercera generación.
Enmiendas agrícolas de primera generación
- Cal agrícola (roca caliza molida o carbonato de calcio mineral).
- Cal Dolomita (roca dolomita molida o mezcla natural de carbonato de calcio y carbonato de magnesio).
- Roca fosfórica (roca flúor apatita molida o fosfato de calcio mineral).
- Silicato de Magnesio (rocas serpentinas molidas o silicatos de magnesio).
- Yeso agrícola (yeso de mina molido o sulfato de calcio mineral).
- Materias orgánicas compostadas (residuos animales y vegetales).
Enmiendas agrícolas de segunda generación
- Cal viva (caliza calcinada y molida u óxido de calcio).
- Cal apagada (caliza calcinada e hidratada o hidróxidos de calcio).
- Dolomita calcinada (óxido de calcio y magnesio).
- Sulfato de Magnesio (síntesis química).
- Yeso Químico (sulfato de calcio de síntesis química).
- Mezclas Orgánico Minerales (materia orgánica en mezcla con minerales molidos).
- Mezclas elementales de 2 o 3 productos (minerales o químicos) según el análisis del suelo.
Enmiendas agrícolas de tercera generación
- Termofosfatos (rocas fosfóricas calcinadas).
- Óxidos de Magnesio.
- Enmiendas específicas a la medida de las condiciones del suelo (con mezclas de productos minerales y químicos).
Época y condiciones de aplicación
Se pueden aplicar enmiendas en cualquier época del año, sin embargo, se recomienda que se apliquen al inicio de la época lluviosa o un poco antes, para que la humedad (lluvias) hagan reaccionar los materiales.
No se deben aplicar enmiendas durante las épocas de fertilización del suelo. Se debe esperar, al menos un mes, para que reaccione la enmienda, antes de aplicar un fertilizante.
En siembras nuevas, es recomendable que la enmienda se incorpore con la tierra de llenado, antes de sembrar. En suelos ácidos de textura arenosa, se debe dividir la dosis al menos en dos épocas de aplicación.
Productos como los óxidos e hidróxidos reaccionan rápidamente, pero su efecto residual no es muy prolongado debido a que se consumen inmediatamente. Los carbonatos son de reacción más lenta y con mayor efecto residual.
Aplicar mayor finura de tamiz del material en terrenos no arenosos.
Los materiales más finos tamiz 100 a 200 (0.15 a 0.075 mm de abertura de la malla), reaccionan mucho más rápido que los menos finos tamiz 60 a 100 (0.25 a 0.15 mm de abertura de la malla), cuyo efecto residual es menor. Se deben utilizar materiales más finos en suelos arcillosos y menos finos en suelos arenosos.
Características y beneficios de los principales tipos de enmiendas agrícolas
Carbonato de calcio
El carbonato de calcio es una enmienda mineral que se puede aplicar al suelo para mejorar su estructura, aumentar la cantidad de materia orgánica y mantener el pH adecuado. El carbonato de calcio también ayuda a mejorar la absorción de nutrientes por parte de las plantas.
Cal agrícola Dolomita
La dolomita es una roca sedimentaria compuesta principalmente por carbonato de calcio y magnesio. Se usa como enmienda para equilibrar el pH del suelo y aportar cantidades importantes de calcio y magnesio. La dolomita también reduce la salinidad, lo que permite a las plantas absorber mejor los nutrientes del suelo.
Carbonato de magnesio y harina de basalto
El carbonato de magnesio es una enmienda mineral ricamente nutrida con magnesio que se usa para equilibrar el pH del suelo. La harina de basalto es una forma altamente absorbible de silicio que se usa para mejorar la estructura del suelo, promover el crecimiento de las raíces y aumentar la resistencia del suelo a la sequía.
Cómo equilibrar el pH y la salinidad del suelo con enmiendas agrícolas
Las enmiendas agrícolas pueden ayudar a equilibrar el pH del suelo mediante la liberación gradual de nutrientes útiles como calcio, magnesio o silicio al suelo. También ayudan a reducir la salinidad del suelo al mezclarse con otros materiales orgánicos y permitir que los microorganismos del suelo ayuden a descomponer los residuos orgánicos.
Cómo aportar calcio
El calcio es uno de los elementos más importantes para un buen desempeño de las plantas. Una forma eficaz para proporcionar calcio al suelo es mediante el uso de enmiendas minerales como carbonato de calcio o dolomita, ya que estos contienen cantidades significativas de este elemento nutritivo.
Magnesio o Silicio con enmiendas agrícolas
El magnesio o el silicio son otros elementos importantes para el buen desempeño de las plantas, así como para mantener un buen equilibrio químico del suelo. El carbonato de magnesio o la harina de basalto son excelentes opciones para proporcionar estos elementos al suelo, ya que ambos contienen cantidades significativas de estos nutrientes beneficiosos para las plantas.
Cómo elegir la enmienda agrícola adecuada para su suelo
La elección correcta de una enmienda depende del tipo de suelo, así como del objetivo particular que se quiere lograr con ella. Por lo tanto, es importante realizar pruebas antes de comprar las enmiendas para determinar exactamente qué nutrientes necesita el suelo y cuáles son los mejores materiales para satisfacer estas necesidades.
Las enmiendas agrícolas son una herramienta invaluable para los agricultores que buscan mejorar la calidad y cantidad de sus cosechas. Estas enmiendas pueden mejorar el suelo, aumentar la producción, mejorar las propiedades nutricionales de los cultivos y reducir la cantidad de productos químicos utilizados en el proceso de cultivo.